Preguntas frecuentes sobre la contratación de Internet
¿Cuál es la diferencia entre el ADSL y la Fibra Óptica?
El Internet con ADSL se puede instalar en casa tan sólo disponiendo de un router y la fibra óptica es necesario que te la instale un profesional. La segunda de estas opciones (fibra óptica) es mejor porque proporciona una conexión más rápida y estable, pero el ADSL llega a zonas a las que, a día de hoy, no llega la fibra. Será la compañía quien te dirá si en tu nueva vivienda hay o no cobertura de fibra, pero, si la hay, te la recomendamos. Eso sí: no te asustes si ves al técnico de Internet tocando los cables que hay por dentro de las paredes de tu vivienda; la instalación de la fibra óptica es compleja y lleva un tiempo.
¿Qué es el famoso 4G?
Es (resumiendo) el internet de los móviles (que también se puede usar para compartir conexión a otros dispositivos). Lo bueno: te lo puedes llevar a cualquier parte. Lo malo: suele tener límite de descargas y la conexión no es tan estable como la cobertura de fibra o el ADSL
Si mi mudanza es a un piso de alquiler, ¿puedo contratar fibra óptica?
Sí. Al ser el inquilino del piso tienes todo el derecho a comparar ofertas de internet y a contratar la que mejor se adapte a tus posibilidades, pero es mejor que te pongas a pensar si te sale a cuenta. Es decir, si vas a estar poco tiempo en el piso y la compañía de internet que has elegido te cobra por la instalación de la fibra o te exige permanencia, quizás no sea la opción que más te conviene. En este último caso podrías optar por el ADSL.
¿Qué pasa si quiero anular el contrato de mi compañía de Internet?
Legalmente hay 14 días naturales para que puedas renunciar al contrato contraído con tu compañía de Internet. No obstante, si te han instalado la fibra óptica, pueden cobrarte, aunque te retractes dentro de este periodo “de prueba”.
¿Será necesario volver a instalar la fibra óptica si me cambio de compañía?
En absoluto. La instalación se hace una sola vez y luego la portabilidad se gestiona entre compañías. Es el mismo caso de cuando cambias de compañía de móvil, pero sigues usando el mismo terminal.